Turquía, país referente en los implantes capilares
Muchos hombres y mujeres sufren complejos por la caída paulatina del cabello, por este motivo, suelen acudir a clínicas especializadas en Turquía, para recuperar el pelo perdido con el paso de los años.
Muchas personas sufren pérdida de cabello con el paso de los años que acaba provocando la calvicie y otros problemas que pueden rebajar la autoestima y al final deciden revertir la situación acudiendo a una clinica capilar para hacerse injertos que vuelvan a poblar la cabeza de pelo.
Normalmente son hombres los que acuden a este tipo de tratamientos, pero también mujeres, por motivos concretos con un post embarazo, terminan por tomar la decisión de implantarse pelo.
Los injertos capilares son una opción que cada vez usan más personas. Hace unos años la ciudadanía era más reticente a estos tratamientos por vergüenza o por dudas con respecto a sus resultados pero esta práctica ya se ha normalizado y los resultados han demostrado ser buenos. Eso sí, acudir a una clínica de este tipo a someterse a los implantes capilares no es ningún juego, ni por supuesto es un proceso barato, por lo que es importante elegir bien el centro adecuado para obtener garantía de resultados a un precio justo.
En base a este contexto, Turquía se ha convertido en un país referente para realizar este tipo de intervenciones, entre otras cosas, porque acogen a los pacientes de manera mucho más rápida, cuentan con técnicas avanzadas y además, el ahorro es mayor.
¿Por qué escoger Turquía?
Por precio y experiencia, muchos clientes acuden a Turquía a realizarse los injertos capilares. En el país llevan años de ventaja en este tipo de tratamientos y el precio es más accesible, por ejemplo, que en España, por lo que volar hasta Estambul para someterse al tratamiento no es una opción nada descabellada.
En el país se pueden encontrar diversas clínicas expertas en este tipo de procesos, ofreciendo grandes resultados a buenos precios y con suculentas ofertas que no se deben dejar escapar.
¿Cómo es el procedimiento para hacerse un trasplante capilar en Turquía?
El primer paso es decidirse a revertir la pérdida del cabello. Una vez se haya tomado la decisión, habrá que seguir el procedimiento adecuado para volver a disfrutar de una cabeza repleta de pelo.
Contacto
Lo primero que hay que hacer es elegir una buena clínica en Turquía y ponerse en contacto con ella para obtener información y recibir atención individualizada.
Envío de imágenes
Para que los expertos analicen el caso de manera personalizada será necesario el envío de fotos que muestren la o las zonas escasas de pelo. Se ofrece una consulta online para detallar el problema y obtener toda la información.
Concretar fecha de operación
Una vez llevado a cabo el estudio y calcular el coste, el siguiente paso será concretar el día D en el que se iniciará el tratamiento presencial en Turquía.
Reservar los vuelos
Una vez acordado el precio y la fecha de la operación, lo siguiente será sacar los vuelos de ida y vuelta a Estambul. La clínica se hará cargo de los desplazamientos del aeropuerto al hotel y al hospital.
Análisis de sangre
Se podrán conocer las instalaciones y al personal que realizará una prueba de sangre para descartar enfermedades como el VIH o hepatitis.
Operación
Llegó el momento. Tras analizar las pruebas de sangre y comprobar que todo esté en orden se llevará a cabo la intervención.
Medidas de cuidado
Al día siguiente de la operación se comprobará que se haya realizado con éxito de nuevo en la clínica. Se informará sobre los cuidados y tratamientos a llevar a cabo en las siguientes fechas y se ofrecerá la atención por teléfono, WhatsApp o email.
Precios y tipos de tratamientos
La mayoría de clínicas en Turquía ofrecen diferentes tratamientos capilares, cada uno de ellos más o menos avanzados, dependiendo del tipo de problema que se presente y las necesidades de cada paciente.
En cualquier caso, los precios oscilan entre los 2.000 y 3.000 euros, aproximadamente, teniendo en cuenta que aquí no solo se incluye el tratamiento y la intervención en sí, sino también otros gastos como las consultas o los traslados.